Foto: En 2008, Greenpeace hizo campaña contra los buques suecos que llevan a cabo actividades de pesca ilegal de la UE en el Sáhara Occidental ocupado.

El 9 de octubre de 2014, el TJUE aprobó una resolución que forma parte de un largo proceso legal llevado a cabo durante muchos años en los tribunales suecos.

La disputa estribaba en si era legal o no que los pescadores realizasen actividades de pesca en lo que el proceso del tribunal ha llamado “zona de pesca de Marruecos”, al mismo tiempo que la UE tenía un Acuerdo de asociación pesquero con Marruecos. Toda la flota pesquera de la UE está implicada a través de las autorizaciones otorgadas por Bruselas.

En 2009, dos pescadores suecos fueron acusados por el tribunal de distrito sueco de Gotemburgo de pesca ilegal durante el período de abril 2007 a mayo 2008.

Sus dos buques, Nordic IV y Aldo, no contaban con los permisos pertinentes de las autoridades pesqueras suecas y los reglamentos de la UE de acuerdo con el fiscal, que también señaló que la pesca había generado grandes beneficios, aproximadamente 20 millones de coronas suecas (2,3 millones de euros).

Tras varios años de retraso en parte debido a la obstrucción por parte de los acusados, el proceso judicial finalmente se llevó a cabo en octubre de 2012.

Los acusados alegaron que ellos, de hecho, no eran responsables de la pesca en las costas del Sáhara Occidental durante este período, sino que habían alquilado sus buques por separado a través de acuerdos de alquiler de embarcaciones sin tripulación a la empresa pesquera marroquí Atlas Pelagic en Dajla. La defensa alegó que los permisos de pesca, por lo tanto, no eran necesarios.

El tribunal de distrito de Gotemburgo estableció que los pescadores habían llevado a cabo pesca ilegal, ya que de hecho habían sido responsables de la pesca sin los permisos pertinentes. Sin embargo, debido a un error formal en la descripción del presunto delito por el fiscal, los dos pescadores fueron declarados no culpables.

El fiscal apeló el veredicto y, en septiembre de 2013, el caso llegó al tribunal de apelación de Gotemburgo de Suecia.
Esta vez la defensa afirmó que en un párrafo específico del Acuerdo de Asociación Pesquera UE-Marruecos de 2006, podría interpretarse como legal la firma de acuerdos privados con empresas marroquíes para este tipo de pesca.

Por ello, el tribunal de apelación decidió pedir una resolución preliminar (“förhandsbesked” en sueco) al Tribunal de Justicia de la UE.

La respuesta de 9 de octubre del Tribunal de Justicia de la Unión Europea es que “el Acuerdo de pesca, en particular su artículo 6, debe interpretarse como excluyente de la posibilidad de que los buques comunitarios lleven a cabo actividades de pesca en las zonas de pesca marroquíes sobre la base de una licencia expedida por las autoridades marroquíes sin la intervención de las autoridades competentes de la Unión Europea”.

Los pescadores suecos apoyan la afirmación de la fiscalía de que la pesca se hizo de manera ilegal. No se conoce la fecha para que el tribunal sueco de apelación continúe con el proceso legal y emita un veredicto final.

WSRW y la revista sueca Västsahara han seguido de cerca el proceso desde su inicio.

Cabe señalar que, según WSRW, absolutamente ninguna licencia de pesca debería ser otorgada por el Gobierno marroquí para las aguas del Sáhara Occidental, por una cuestión de derecho internacional. Las reclamaciones de Marruecos de la soberanía sobre el Sáhara Occidental son rechazadas por la comunidad internacional y por la Corte Internacional de Justicia. Sin embargo, Marruecos sigue ocupando ilegalmente la parte occidental del territorio no autónomo. El TJUE se ocupa aparte de esta cuestión sobre la legalidad de la pesca de la UE en el Sáhara Occidental.

Este año el Frente Polisario interpuso un recurso contra el Consejo Europeo en el TJUE para anular el Acuerdo de Asociación Pesquera UE-Marruecos.