Western Sahara Resource Watch ha participado en el Foro Social Mundial que se hacelebrado este fin de semana en Madrid, dentro de los talleres del Sahara, ayer hoy y mañana, que a su vez se enmarcaban dentro del lema del taller "África, el continente olvidado"
Madrid acogía durante este fin de semana al Foro Social Mundial, un espacio abierto al encuentro, plural, no confesional, no gubernamental y no partidario, un espacio de intercambio de experiencias y de articulación de entidades y de movimientos sociales de Madrid.

Entre los distintos talleres celebrados en el FSM se encontraban los dedicados a África, el continente olvidado. Dentro de estos talleres estaba el del Sahara, organizado por la Plataforma de Apoyo Político al Sahara Occidental (PAPPS) y al que invitaron, entre otras organizaciones, a Western Sahara Resource Watch.
WSRW se centró en la necesidad de denunciar a las empresas que están explotando los recursos naturales del Sahara de forma ilegal e inmoral, y en la importancia de que la sociedad civil y los movimientos alternativos se movilicen para frenar este expolio a todos los niveles, tanto en simples acciones como no comprar productos de empresas que explotan los recursos del Sahara, o con la denuncia ante sus gobiernos de los acuerdos de sus países o de la UE con Marruecos, que no excluyen explícitamente el territorio ocupado del Sahara Occidental.
WSRW invitó a los asistentes a firmar la campaña contra el acuerdo de pesca de la UE con Marruecos, con el fin de hacer llegar a las instituciones europeas el más absoluto rechazo de la sociedad al incumplimiento de la legalidad internacional.
La empresa neerlandesa-noruega con sede en Turquía, dedicada a la producción de alimento para peces, depende de los cuestionables certificados emitidos por MarinTrust para respaldar sus importaciones procedentes del Sáhara Occidental ocupado.
El sistema de certificación blanquea productos pesqueros multimillonarios procedentes del Sáhara Occidental ocupado, bajo un falso país de origen.
La empresa certificadora LSQA ha cesado toda su actividad en el Sáhara Occidental, donde anteriormente había certificado a productores marroquíes que operaban en los territorios ocupados.
Una década después de su anuncio inicial, el destino de uno de los parques eólicos de Enel en el Sáhara Occidental ocupado sigue siendo incierto.